27/1/13

Lactancia Materna: Un acto de amor

Debes saber que para preparar, fortalecer y lubricar los pezones sólo necesitas: aire, leche, agua y sol.

La crema de caléndula está permitida para la lubricación de los pezones.

Los pezones planos o invertidos no impiden amamantar, el bebé a través de la succión será el mejor formador del pezón.
Al apoyar suavemente el índice por encima de la areola y sostener el pecho con los otros dedos, el pezón se dirige hacia adelante o ligeramente hacia abajo en una correcta posición.

Cuando amamantes es fundamental que busques una posición cómoda con las espalda y los brazos bien apoyados y distendidos. Colocá a tu bebé bien pegado y enfrentado a tu cuerpo (panza con panza) para que no tenga la cabecita girada.
Verificá que los labios del bebé estén evertidos tomando una gran parte de la areola del pezón (te evitará grietas).

Podés seguir amamantando cuando te incorpores al trabajo. Dos semanas antes empezá a extraerte leche en la forma que sea más fácil y en los momentos de mayor producción, como después de cada mamada, de noche o cuando sea conveniente.



La leche extraída en el día se recoje en un mismo envase limpio y se puede conservar en la heladera por 24 a 48 horas. En el freezer por más de 3 meses. Descongelar bajando la cadena de frío y entibiar bajo la canilla de agua caliente y ofrecer al bebé en vaso o cucharita o como le resulte más cómodo a la persona que lo alimentará. Descartar lo que no tome.

Los bebés alimentados a pecho reciben de su madre una serie de anticuerpos que los ayudan a hacer frente a las posibles enfermedades. Tienen menos dolores de oídos, gripes, alergias a los alimentos, eczemas, asma, etc.

Dar el pecho te ayudará a recobrar la figura más rápidamente, ya que perder peso puede ser más fácil.

Al amamantar el útero retorna a su tamaño normal en menos tiempo, se producen menos hemorragias después del parto y hay menos posibilidades de padecer anemia.

Es importante saber:
  • Todas las mujeres pueden amamantar.
  • Ninguna leche de fórmula puede proveer a tu bebé las proteínas, grasas, azúcares, minerales y vitaminas que necesita en cada etapa de su crecimiento. Es el único alimento que cambia su composición para adecuarse a las necesidades de tu bebé.
  • Amamantar a tu hijo (aún siendo este no biológico) es una experiencia única en la vida de una mujer. Propicia un acercamiento entre el bebé y su mamá, creando especiales vínculos entre ambos.
  • Amamantar es placentero.
Además:
  • Evita las bebidas alcohólicas, éstas pasan a la leche materna.
  • No consumas cigarrillos. Está demostrado que las mamás fumadoras tienen lactancias de menor duración. Los hijos de padres fumadores pueden presentar mayor incidencia de enfermedades respiratorias.

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